Los dispositivos activos de aislamiento de explosiones detectan cambios en los parámetros de la mezcla de polvo y aire, y reaccionan automáticamente mediante la liberación de agentes supresores o el aislamiento inmediato de la zona afectada. Entre estos dispositivos se incluyen las barreras HRD, así como las válvulas de accionamiento neumático o eléctrico.
Los dispositivos pasivos de aislamiento de explosiones se activan directamente por el aumento de la sobrepresión o el flujo de aire generado por la explosión. Ejemplos de tales dispositivos son las válvulas de retención.
La instalación de sistemas de aislamiento de explosiones es obligatoria en zonas clasificadas como peligrosas, conforme a la normativa vigente. Por ejemplo, la norma europea de protección contra explosiones EN 1127-1 proporciona una lista y descripción de los dispositivos técnicos diseñados para evitar la propagación de explosiones:
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Barreras de supresión (barreras HRD): al detectar una explosión, el sistema libera rápidamente agentes extintores. En aplicaciones específicas, como la prevención de explosiones de polvo de carbón en minas, se requieren barreras de esquisto (con polvo inerte) y barreras de agua.
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Válvulas y compuertas de acción rápida: utilizadas habitualmente para el aislamiento de explosiones de polvo en sistemas industriales.
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Válvulas rotativas y válvulas de doble compuerta: destinadas a impedir la propagación de llamas y ondas de presión a través de líneas de proceso.
El objetivo principal de los sistemas de aislamiento de explosiones es aislar de manera efectiva la zona del incidente, protegiendo las áreas adyacentes y minimizando los daños humanos y materiales.El aislamiento de explosiones garantiza la protección eficaz frente a la propagación de explosiones dentro de los sistemas industriales. Gracias a dispositivos de alta respuesta, se bloquea el avance del frente de llama y el aumento de presión, aislando de forma segura las unidades adyacentes. Esta tecnología no solo protege la vida de las personas, sino que también minimiza las pérdidas materiales y asegura la continuidad operativa de su instalación.